Centro de Espiritualidad "Francisco Palau"

Centro de Espiritualidad "Francisco Palau"
Un lugar para el encuentro con Dios

viernes, 22 de enero de 2016

ORAR CON EL EVANGELIO DE CADA DIA

Lunes, 25 de enero

LA CONVERSIÓN DEL APÓSTOL SAN PABLO. “Vayan al mundo entero y proclamen el Evangelio a toda la creación” (Mc 16,15). La conversión a Cristo condujo a Pablo a ampliar su comprensión de la justicia, a poner en primer lugar la fe y no más la ley. La justicia de Dios es su perdón y misericordia. El amor de Dios no nos cierra en nosotros mismos sino que nos ensancha el interior y nos pone en camino misionero. En el nombre del Señor toda la humanidad se llena de vida nueva. Ponte ante Dios con la familia de hermanos y hermanas que se te ha regalado; ponte ante la humanidad con la buena nueva de Dios en los labios y en el corazón. “Es tarde pero es nuestra hora. Es tarde pero es todo el tiempo que tenemos a mano para hacer el futuro. Es tarde pero somos nosotros esta hora tardía. Es tarde pero es madrugada si insistimos un poco” (P. Casaldáliga).    
  • Martes, 26 de enero.  SAN TIMOTEO Y SAN TITO, obispos (Compañeros de San Pablo) “Está cerca de ustedes el Reino de Dios” (Lc 10,9).  Todo mensajero prepara caminos, abre brechas al Misterio. Todo mensajero anuncia que Dios está cerca. Todo mensajero proclama que el amor de Dios está a la puerta, buscando quien lo acoja. Recógete en tu interior, habita la morada más honda de tu vida, despierta tu fe para entrar en la presencia del Dios que te habita, abre tus manos y ofrécele tu vida. ¡Qué cerca estás de mí, más que yo mismo! Cuando me asomo al brocal de mi pozo, veo tu rostro y el mío. ¡Gracias, mi Dios, por esperarme tanto! 
  • Miércoles, 27 de enero. "Salió el sembrador a sembrar" (Mc 4, 3). El Reino de Dios viene de modo irreversible y alguna vez aparecerá en todo su esplendor. Jesús es el sembrador de esa semilla. No caigas en el desánimo ni en analizar y clasificar el campo de misión. La semilla del Reino de Dios se pierde tan solo cuando se queda en las manos cerradas de un sembrador demasiado prudente y calculadorCon tus dones, siembras de semillas de misericordia en mi corazón. Con mi vida misionera siembro de Evangelio el mundo. ¡Bendito y alabado seas, Señor!
  • Jueves, 28 de enero. “¿Se trae el candil para meterlo debajo del celemín o debajo de la cama, o para ponerlo en el candelero?” (Mc 4,21). ¡Qué contrasentido el de envolver la luz en oscuridad! Jesús es la luz que ilumina en medio de la humanidad; se hace presente en los caminos y en las plazas; conecta con la esperanza escondida de todo ser humano. ¿Qué es tener luz? ¿Acaso no es tener lleno de misericordia el corazón y dispuestas las manos para realizar algo a favor de los más pobres?  Llevo tu Luz en lo más hondo de un manantial secreto: Dios, mi Padre me ama. Vivir como hijos de la luz significa escuchar y acoger la luz de los otros, y ofrecer gratuitamente lo que uno tiene mediante el diálogo, para construir juntos una vida fraterna y solidaria.  
  • Viernes, 29 de enero. “El Reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra” (Mc 4,26).  ¿Quién sabe lo que va madurando en los corazones que se abren a Dios? ¿Qué frutos de comunión, de creatividad y de vida estará gestando el Espíritu en el interior de las personas? Recuerda a María, cómo guardaba las cosas de Dios en el corazón. Aprende, como ella, a estar en la palabra de Dios. ¡Qué alegría vivir y orar sobre tu don!  Orar es no perder la esperanza y seguir sembrando el Evangelio en el propio corazón.    

  • Sábado, 30 de enero. “Maestro, ¿no te importa que nos hundamos?” (Mc 4,38).   Jesús se echa a dormir, para que se despierte nuestra fe y se ponga en marcha la solidaridad entre generaciones y pueblos. “Estamos llamados a ser los instrumentos del Padre Dios para que nuestro planeta sea lo que él soñó al crearlo y responda a su proyecto de paz, belleza y plenitud” (Laudato si).   Orar es adherirnos a Jesús e ir de prisa a poner nuestro granito de arena para ayudar a los más pobres.  Yo callo y sigo contigo. Yo callo y te quiero